Por un guerrero

El domingo 29 de julio se realizó la segunda carrera del campeonato 21 k de la CAU (Confederación Atlética del Uruguay); fue en Durazno en un día frío y ventoso. Fuimos con grandes expectativas pues era nuestra primera carrera en esa ciudad y la primera de 21 k de calle —hemos realizado varias de esa distancia pero en modalidad cross—. Para agregar expectativas y emoción habíamos decidido correr por un “guerrero de la vida”: Pedro Martino y, en el camino, Claudia nuestra entrenadora nos planteó los tiempos que pretendía que lográsemos. Íbamos cargados y motivados.

Llegamos a Durazno un rato antes de la largada y vimos poca gente. Y entonces llegó el primer regalo del día: ¡mi madre, mi hermana, mi sobrino y una amiga de la familia habían ido desde Young a alentarlos! Fue un shock vitamínico que sumó un compromiso más… Iba a ser una mañana desafiante. A las 11:00 h se largó pues todos queríamos finalizar en hora para ver el partido de Uruguay en el marco de los Juegos Olímpicos. Con frío salimos a hacer una vuelta de 1 k y pocos metros y luego el circuito (cuatro vueltas de 5 k cada una).

Jose y yo corrimos juntas, igual que el domingo anterior. Hacemos buen equipo pues tenemos un ritmo similar y afrontamos la carrera con el mismo paradigma (alguna que otra charla, aplausos, agradecimientos y reflexión cuando lo amerita). Terminamos la primera vuelta ya sin frío y a buen ritmo; qué lindo fue pasar cerca del arco y encontrar a mi familia con voces de aliento, aplausos y fotos. Tomamos agua y seguimos.

En la segunda vuelta nos pasó el corredor que iba en la punta, tenía un paso espectacular, una zancada larga y firme. Y nosotras seguimos. Soplaba un fuerte viento y en ciertos tramos se dificultaba avanzar, además había poca gente en el circuito y eso es sinónimo de poco ánimo… un circuito triste.

Al finalizar la segunda vuelta escaseaba el agua y en la tercera no había. Es indigna la organización que la CAU desplegó en la carrera de Durazno pues dos aspectos muy importantes de la seguridad fueron descuidados: la vial y la hidratación.  El circuito (en el medio de la ciudad) no fue cercado, los automóviles y las motos no circulaban por la calle por la que iban los corredores pero cruzaban en las transversales y eso es peligroso.  El presidente de la CAU participó del desfile inaugural de los Juegos Olímpicos como miembro de la delegación de Uruguay y portó, para todo el mundo, la bandera de la Confederación. Parece que la CAU está atenta a los Juegos Olímpicos  pero descuida a los deportistas anónimos que participamos de una carrera de 21 k de Durazno; los 108 competidores de Durazno no parecieron ser importantes para la Confederación…

Estos detalles no empañan el desafío de correr 21 k. Además correr en el mes de las Olimpíadas tiene cierta magia pues el espíritu del esfuerzo y de la sana competencia se extiende en el aire. Y cuando se suma una causa solidaria hay más regalos. En carrera, ya no recuerdo si en la segunda o en la tercera vuelta, un corredor se interesó por mi cartel. Le comenté que corríamos con el espíritu de Uruguay por Livestrong y que en esta ocasión lo hacíamos por Pedro, un gran luchador. Me comentó que él también tuvo cáncer —del mismo tipo que Lance Armstrong, el fundador de Livestrong— y que actualmente su hermano también se enfrenta a esa enfermedad. Le pedí que me buscara al final de la carrera para intercambiar correos electrónicos y continuar armando la red.

Ese contacto fue un shock de adrenalina, una inspiración, un abrazo a Pedro y en su nombre a millones; la fuerza necesaria para seguir y en Durazno lograr una marca para el recuerdo.  Jose y yo cruzamos la meta con tiempo espectacular (01:53); Osmar ya nos esperaba pues su tiempo fue todavía mejor (01:44).

Un final con tantos aplausos, fotos y abrazos es además otro regalo. Y la emoción que faltaba, el corredor que se interesó por el cartel se acercó y me entregó su medalla para que en nombre de un guerrero se la regalase a Pedro, otro guerrero. Se me encogió el corazón.

Y el día terminó con un almuerzo con familia y amigos. Después regresamos a Montevideo con el alma plena de excelentes recuerdos y saber que el objetivo del día se había cumplido: correr en honor a alguien que lucha por vivir y que lo hace con dignidad, gallardía y buen humor. Así es Pedro Martino y su fuerza y la de Uruguay por Livestrong fueron la motivación para una excelente carrera en Durazno.

1 comentario en “Por un guerrero

  1. Muy buen comentario , aparte de atleta , periodista. muy buenos tiempos y sigan con estas acciones solidarias para los que precisamos su apoyo pero tambie´n tenemos fuerzas para brindar el nuestro.Abrazos

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