El refinadísimo Polo Bamba Café

Desde fines de octubre, el paisaje cafetero de Montevideo, que parecía estar satisfecho, incorpora una nueva y elegantísima opción: Polo Bamba Café.

Refinada y cosmopolita, la cafetería del Hotel Montevideo tiene piso de damero, paredes vestidas de ornamentos, mosaicos y espejos, mesas de mármol blanco y modernas sillas de madera con inspiración Thonet.

En el conjunto, despuntan las macetas chinas, las plantas y los grandes sillones de terciopelo azul y verde. Hay distintas estancias, un mostrador alto con un cristalero que brilla y un patio exterior.

El ensamble de Polo Bamba Café —firmado por el argentino James Boyd Niven— es perfecto y seductor; nada está librado al azar y todo tiene estilo (¡hasta los manteles individuales!).

El horario es amplísimo y cada día de la semana se sirven desayunos, almuerzos, meriendas y cenas. Si bien Polo Bamba es el café del Hotel Montevideo, está abierto a todo el público, con precios accesibles desde la mañana hasta la noche.

El desayuno, un consumo fuera del hogar poco practicado por los uruguayos, incluye cafetería, pastelería y platos, opciones a la carta y el buffet, característico de la hotelería. El despliegue de Polo Bamba es amplio y tentador, sin abrumar, tanto para un desayuno parco como para uno más abundante.

La gastronomía, de sabores definidos y con porciones justas, es responsabilidad de Florencia Courrèges y Alejandro Morales (Cultural Alfabeta y Escaramuza), mientras que el café de especialidad es de Cultural Alfabeta, seleccionado y tostado por Álvaro Planzo, un referente del segmento nacional. Del proyecto, que también tendrá una arista cultural, participó el reconocido gestor Alejandro Lagazata (La Lupa Libros, Criatura Editora, Cultural Alfabeta, Escaramuza).

Con su nombre, este Polo Bamba honra el café literario más emblemático de Montevideo de fines del siglo XIX y principios del XX. Aquella cafetería, fundada por Francisco San Román en 1885 y ubicada en la zona de la Plaza Independencia, albergó tertulias de intelectuales, periodistas y estudiantes en un recinto al estilo parisino que, al igual que este, brilla en el Río de la Plata.

La generación del 900 (Florencio Sánchez, Ernesto Herrera, Roberto de las Carreras, Álvaro Armando Vasseur, Julio Herrera y Reissig, Alberto Zum Felde, Ángel Falco, Alberto Lasplaces y el editor Orsini Bertani, entre otros) se reunía en las mesas del Polo Bamba. Administrado por su nuevo dueño, Severino San Román, se transformó en el «Ateneo de la Bohemia», un espacio fermental que hizo que la anarquista Juana Rouco Buela, quebrando la moral burguesa del momento, comenzara a participar de la vida del café.

Cerró en 1913 o 1915 y junto al Tupí Nambá inició una tradición cafetera fermental que tuvo casi un siglo de esplendor.

Polo Bamba Café

Hotel Montevideo, 26 de Marzo y José B. Lamas. Además del café, el hotel cuenta con Polo Bamba Bar, en el piso 10, abierto de lunes a sábados desde las 6 pm.

«El mundo del café precisaba la Expo Café»

El año no ha cerrado, pero cuesta imaginar que el segmento cafetero uruguayo cuente con una actividad más congregante que la Expo Café, realizada el primer fin de semana de setiembre en el Laboratorio de Tecnología del Uruguay (Montevideo). A cargo de Useful-Media y Buen Café.app, la exposición recibió diez mil visitantes en dos días y tuvo treinta y tres puestos (diecinueve dedicados al café y los demás con productos accesorios).

Treinta personas trabajaron para la realización de Expo Café Uruguay. El espresso fue, obviamente, el rey del fin de semana. Se sirvieron miles. Las cafeterías se quedaron sin vasos. Los baristas se agotaron de explicar orígenes, puntajes y notas de cata, entre otros. El café —en todas sus aristas— era el tema en torno al que giraron las conversaciones.

«Fue una prueba para todos. No solo para nosotros, fue también la primera expo para la mitad de los expositores. Esto marca la pauta de que el mundo del café precisaba la Expo Café. Ya estamos trabajando en la próxima edición, especialmente en las que consideramos las fallas, que son tres o cuatro cosas que se nos fueron de las manos por el volumen de gente que asistió», explicó Santiago Fernández, en representación de Useful-Media y Buen Café.app.

Con un par de espressos, en la cafetería de Cultural Alfabeta, Santiago contó que, semanas después, siguen procesando imágenes y videos. El material —veinte horas de video y miles de fotografías— los emociona y también les sirve para detectar las mejoras. Se nutren, además, de los comentarios recibidos. «Queremos agregar mesas y sillas adentro, además de las que pusimos afuera. (…) Tuvimos un desborde de vasos y estamos viendo, para la próxima, los de degustación de vidrio, que se usan en catas y en demostraciones», agregó el organizador.

Para Fernández, la primera edición de la Expo Café les permitió generar marca. Se imaginaron una exhibición «demencial», a la altura de las que se realizan en Milán y Nueva York. Tuvieron que recortar presupuesto para que fuera viable, pero igualmente no escatimaron en ciertos detalles: las banderas en el techo, el alfombrado, la playlist, la calidad de imágenes y videos, las publicaciones en redes durante el fin de semana, y hasta una heladera con postres para niños.

El campeonato de latte art —con especial foco en las cámaras y pantallas para ver todo lo que sucedía— y las charlas tuvieron una especial curaduría. Cuidaron todos los detalles: la elección del equipamiento, la locación, los oradores y los temas.

Expo Café Uruguay hizo que los asistentes «sepan que hay otros cafés distintos, que hay marcas nuevas. (…) Muchos baristas me dijeron que se sentían en Disney. ¡Es que la gente quería saber y probar! En la próxima edición, vamos a profundizar justamente eso: que la gente sepa que hay algo más», detalló Fernández.

Mientras el equipo organizador planifica la segunda edición de Expo Café Uruguay, en su sitio web hay una tienda, que estará disponible un tiempo más, y planifican publicar información y videos de la exposición, además de pistas de lo que tendrá la edición 2023. «Esta fue la primera cita con el café; si la persona va con más información en la próxima, le va a parecer todo más interesante —resumió el organizador—. También queremos sorprender, así que habrá novedades». 

Crédito de imágenes: Expo Café Uruguay

El café de especialidad en la cafetera eléctrica estándar: una pareja infrecuente

Tenés la clásica cafetera eléctrica de filtro y cada mañana te toca preparar café para varias personas; te vas a casa de tus padres o un fin de semana a una cabaña en la que solo hay una eléctrica y te gusta el café de especialidad, ¿qué hacés?, ¿cargás la prensa francesa o la Aeropress? ¡Aprovechá ese espacio y llevá café de especialidad! Con las recomendaciones de quienes saben del tema, es posible tomar una buena bebida preparada en la cafetera eléctrica de goteo de hogar.

Cuatro especialistas con base en Montevideo (Erik Argueta, Haroldo Darnauchans, Álvaro Planzo y Alicia Radi) explican qué tener en cuenta para potenciar un electrodoméstico que es parte de la cocina de numerosos hogares uruguayos.

Los bemoles a considerar

«Es un método cómodo, que está menospreciado. Hay argumentos para menospreciarlo, pero basta saberlos y listo», dice Álvaro Planzo, tostador de Culto Coffee Roasters. La falta de control de la temperatura y el prolongado tiempo de filtrado son, a su entender, las cuestiones más débiles de las cafeteras de goteo del segmento básico e intermedio (recordemos que existen cafeteras de alto estándar; como la Moccamaster, considerada la referencia del rubro).

Planzo sugiere usar una receta básica de filtrado y probar. Cuenta que, en más de una oportunidad, ha usado la cafetera eléctrica clásica y tira un pique: «El portafiltro de la máquina, que se desarma para limpiar, lo usás para filtrar. Calentás el agua para controlar la temperatura y lo usás como un V60 o filtro Melitta. Es una terrible extracción. Yo usaría, en este caso, una molienda un poquito más gruesa».

Alicia Radi, de Cafetto Prado, se considera una purista y explica que este tipo de método no es común en el café de especialidad, ya que se pierden parámetros de control: la posibilidad de realizar preinfusiones, por ejemplo. «Es un método de extracción muy conocido, mucha gente lo tiene en su casa, al igual que la cafetera italiana. Hay que pedir la molienda para la cafetera que se va a usar y elegir un buen café, un specialty», agrega la tostadora de Cafetto Prado. «Tenés que preparar el café, servirlo y tomarlo; no hay que recalentarlo en el calentador, porque se quema y se oxida».

No pedirle peras al olmo

Haroldo Darnauchans (enólogo, barista y juez del campeonato argentino Exigí Buen Café) menciona que, si bien el artefacto no lo convence, «hidratando un poco el café, apenas uno lo pone en el filtro antes de que empiece a subir el agua a una temperatura mayor, quizás lo ayudamos a defenderse un poco. Hidratarlo con agua fría, humedecerlo. También se favorece el filtrado con una molienda un poquito gruesa —una pizca más que la de francesa—. (…) Al alivianar el pasaje de agua sobre el café, se podrán sacar las mejores características del grano».

«Yo no elegiría un café muy complejo, buscaría un café de especialidad de calidad, pero sencillo, un café correcto. Nos tiene que quedar claro que no podemos exigirle al café su mejor potencial. Si no le doy las condiciones ideales, no voy a lograrlo», agrega con tono didáctico.

Claves y receta de filtrado

Erik Argueta (Cardenal Café), barista de origen salvadoreño, recuerda que estas cafeteras son habituales en los hogares de su país y reconoce que no lo son en el ámbito del café de especialidad. Para el tostador de Cardenal, las claves son usar filtro de papel, agua filtrada, café de especialidad fresco con la molienda adecuada y, fundamentalmente, mantener la limpieza correcta del goteo de la máquina, porque suelen quedan residuos de café que generan una costra que produce sabores indeseables.

Con estos datos, no hay más que probar. La receta de la prensa francesa, según la Specialty Coffee Association, es de 36 gramos de café por 660 mililitros de agua (en los manuales de café y en las cuentas de redes de cafeterías y baristas hay ratios similares para testear). Con estas sugerencias, la cafetera eléctrica espera una nueva oportunidad.

La estrella del segmento

La Moccamaster es la máquina estrella en filtrado automático. En Uruguay, se consigue en Seis Montes y por Mercado Libre. Es un artefacto costoso, testeado y aprobado por dos importantes entidades: la European Coffee Brewing Centre y la Specialty Coffee Association.

Gerard Clement Smit fundó Technivorm, la empresa neerlandesa que fabrica estas cafeteras, ubicada en la ciudad de Amerongen. La primera máquina fue diseñada en 1968 y, según la página web del producto, desde ese momento la marca ha liderado el mercado.

Diseñadas por expertos, hechas a mano y probadas individualmente, las máquinas Moccamaster están diseñadas con materiales de alta calidad y gran compromiso sustentable. Entre las prestaciones, se destacan el manejo de la temperatura (de 92 a 96 ºC), la opción de jarra entera o media jarra, el apagado automático, la facilidad de limpieza y la durabilidad.

Créditos de imágenes: Pexels, Pixabay y Unsplash.

Papirosen en Punta del Este: café de especialidad con brisa de mar

En la calle 20, esquina 27, está Papirosen Café. El lugar es pequeño, acicalado y hospitalario, con detalles estéticos (herencia genética de la tienda de decoración de la que es parte). Sirven, con esmero, granos de Culto Café, y la carta que acompaña las bebidas es acotada con productos elegidos especialmente por su calidad (escones, sándwiches con pan de masa madre, tortas dulces). 

Para adecuarse a las medidas sanitarias, las mesas de Papirosen están afuera del local, debajo de una galería. El aire de la península es generoso, también el olor a mar y la atención. Si está fresco, hay mantas. Y si hay ganas de charlar, también habrá amena conversación.

Para Victor Solnicki​, responsable de Papirosen, la clave está en calibrar. Se trata de estar atentos, adecuar y compaginar la máquina de espresso, el molino, la tirada del café y el servicio. «El café es como la vida misma ―dice Víctor―. Hay que calibrar para sacar lo mejor, para adecuarse a los tiempos». 

El café de especialidad se expande en el Uruguay y la zona de balnearios ha sido una de las más permeables. Punta del Este no podía ser la excepción y con emprendimientos como Papirosen la oferta cafetera se adecua a las exigencias del público que busca calidad y servicio. 

FrankOne: la cafetera colombiana para preparar café caliente y frío

Dos emprendedores con un mismo anhelo: producir la primera máquina colombiana para preparar café caliente y frío. Dos años de investigación, diversos prototipos y muchas pruebas técnicas. Una financiación a través de Kickstarter que logró 1800 patrocinadores. ¿El resultado? FrankOne, un dispositivo para uso en el hogar y en cafeterías que en treinta segundos prepara café caliente y en cuatro minutos deja lista la infusión en frío.

El ingeniero Eduardo Umaña y el emprendedor Luis Fernando Vélez (Amor Perfecto) son los responsables de esta innovación, ya patentada, que introduce la tecnología VacTec (Vacuum Extraction Tecnhology), un método de extracción al vacío. Según la web de la empresa Frank de Paula —a través de la que se comercializa el producto—, con la FrankOne se logra una bebida dulce, con escaso amargor y acidez. De manera rápida, eficiente y amigable con el ambiente (no utiliza filtros de papel), esta cafetera contiene una pequeña y potente bomba que permite que el agua drene sobre una cama de café molido fino.

En diversos portales especializados, se menciona que el dispositivo es la última y la más novedosa incorporación del rubro cafetero. FrankOne, además, es compacta y portátil, utiliza una batería con carga USB con autonomía para más de cien cafés y presenta equilibrio entre prestaciones y precio.

La cafetera llegó al Uruguay en el último trimestre de 2020 a través de los representantes locales de Amor Perfecto. La presentación oficial se realizó en el instituto Formación Integral Gastronómica (FIG) en noviembre pasado. El entrenador Raúl Martirené fue el responsable de la convocatoria virtual y presencial, con aforo reducido, dentro del ciclo de charlas cafeteras que FIG realizó durante el año. Matías Garreta fue el encargado de mostrar cómo funciona la FrankOne. Con granos Amor Perfecto, el barista preparó filtrados en caliente y varias bebidas frías (solo café, con leche de almendras y con tónica y cítricos).

Al margen de la destreza técnica de Garreta, la FrankOne se caracteriza por ser sencilla y rápida. La cafetera fue diseñada para el uso en el hogar y en cafeterías y solo requiere verter el café, el agua y presionar un botón a los treinta segundos para el filtrado en caliente o a los cuatro minutos para el filtrado en frío.

Con la FrankOne, Amor Perfecto Uruguay amplía su presencia en el mercado local. Además de los cafés clásicos y de ediciones especiales (orgánico, de autor, descafeinado), con la cafetera se completa el ciclo de consumo de productos que cuentan con el reconocimiento de una empresa líder en Colombia.

Cafetera FrankOne, tienda Amor Perfecto Uruguay: $U 8.500,00

El americano para llevar de Café Doré rompe la calma estival montevideana

Cada verano, las novedades cafeteras del año se concentran en el mapa de servicios que se despliega en Canelones, Maldonado y Rocha principalmente. El comienzo de 2021 no fue la excepción a pesar de las restricciones provocadas por la pandemia de la COVID-19. Emprendedores, tostadores y referentes del rubro marcan el paisaje esteño con las opciones para tomar un buen café en el este. Montevideo suele reservarse alguna novedad y en este enero la primera sorpresa del año se sirve en el mostrador de Café Doré.

La cafetería de Pablo Corrado, ubicada en Rivera 2628, tienta a clientes y ocasionales con un café americano a $ 70. El precio, exclusivo para el servicio fuera del local, «es una superpromoción que comenzó a mediados de diciembre, pero que recién ahora comenzamos a difundir en las redes con un video —explica Corrado—. Servimos el americano de manera tradicional, a partir del espresso, o un filtrado que preparamos en la Moccamaster».

«El precio es accesible. Nos encantaría que otras cafeterías nos copien. Somos procafé y queremos unir el mundo del café, por eso el año pasado publicamos el libro «Hay Café»». Pablo Corrado, responsable de Café Doré

Un local pequeño, la situación sanitaria que estimula el consumo en los lugares abiertos y la voluntad de ofrecer café de especialidad a un público cada vez más amplio fueron las variables que determinaron la promoción. «Elegimos el americano porque es la bebida que más se toma en Café Doré. El cappuccino también sale mucho, pero el americano es perfecto para llevar. No tendría sentido con un espresso que es para llevarlo ya puesto», agrega Corrado. «El precio es accesible. Nos encantaría que otras cafeterías nos copien. Somos procafé y queremos unir el mundo del café, por eso el año pasado publicamos el libro Hay Café. Somos una cafetería chiquita y esta es la única acción de precios que podemos hacer para que el café de especialidad sea más popular».

Sin bajar la calidad de los granos de Seis Montes ni alterar la receta del espresso doble con más agua caliente, Café Doré busca incrementar el volumen de ventas con un americano a un precio sensiblemente menor (el descuento ronda el treinta y cinco por ciento). Dos tostadores locales han enfocado su estrategia en las suscripciones mensuales para incrementar el consumo en el hogar y ahora Doré suma en el segmento del take away. Con estas opciones, además de las espléndidas cafeterías montevideanas, la cultura cafetera se enriquece y acompasa las tendencias de las grandes capitales.

____ Hay Café es el primer libro uruguayo sobre café de especialidad. Editado por Grijalbo y bajo la autoría de Pablo Corrado, Andrés Amodio y Sabrina Srur, desde junio de 2020 el libro alimenta la cultura cafetera local. Hay Café es una guía práctica para preparar café de especialidad en el hogar; tiene textos sencillos, elocuentes fotografías y, de regalo, un tour montevideano con dieciséis espressos gratis. $ 1190. Más de 200 páginas con toda la info de la taza perfecta.

____ Technivorm-Moccamaster es la reconocida cafetera de filtro de origen holandés. Hecha a mano, permite «la mejor experiencia del rubro» por su calidad en el filtrado. La Moccamaster logra óptima temperatura y contacto entre el café y el agua según los requerimientos de la European Coffee Brewing Centre y la Specialty Coffee Asociation. En Uruguay, representa y vende Seis Montes Tostadores.

Sugerencias para comprar café de calidad

Hace unos días, en redes sociales, alguien me preguntó cómo comprar buen café. La cuestión, que parece sencilla, puede complejizarse debido a la cantidad de elementos en juego. Pero aquel lector necesitaba una respuesta acotada que le di y, al margen de la contestación concreta, decidí recopilar algunas sugerencias de mi experiencia como consumidora de café y periodista especializada en el rubro.

Como se imaginarán, escribo y corrijo el texto siempre acompañada de una taza de fragante bebida, un filtrado que preparo en casa, aunque suelo usar las cafeterías como espacios de trabajo. Comprar granos en cafeterías, tostaderos o tiendas especializadas es mi primera y gran recomendación. La razón es simple: en estos establecimientos podemos realizar preguntas y obtendremos respuestas basadas en la formación y la experiencia. Las cafeterías ofrecen un plus, pues permiten pedir el café que pensamos comprar, beberlo y hacer las consultas específicas (solo hay que considerar que en el hogar no tendremos esas máquinas y, además, quienes ahí trabajan cuentan con un saber específico y muchos cafés de experiencia).

Los granos de la variedad arábica son preferibles porque son más aromáticos, suaves y delicados, menos amargos y también con menos cafeína que los de la robusta. Al mirar los granos, en el paquete o en la tolva de la cafetería, los tenemos que encontrar uniformes en tamaño y en color, sin roturas ni agujeros.

Del tostado importan tres elementos: que sea natural, el nivel o tipo y la fecha. Conviene que el café sea natural. Siempre. A los cafés glaseados o torrados se les agrega azúcar durante el proceso de tostado, y por ello suelen escogerse los de menor calidad o de descarte para enmascarar sabores. Por otra parte, la bebida que se obtiene con el café glaseado es más amarga y oscura, astringente y con un sabor plano.

Los tostadores de café de especialidad manejan diferentes niveles y perfiles de tostado que seleccionan en función de las características de cada lote. Los niveles se clasifican en tres: suave, medio y oscuro. Con el primero se obtienen bebidas más ácidas, el segundo —que es el más extendido en la actualidad— combina los sabores originales de la planta y los que surgen del proceso químico y en último el tostado potencia amargor e intensidad.

Además del tipo, es importante conocer la fecha de tueste porque, si bien el café no se vence, la riqueza de las notas aromáticas comienza a perderse lentamente.

El método que pensamos usar es sustancial para elegir el tipo de café y la molienda. Esta debe ser fina para el filtro, la cafetera de goteo (la eléctrica) o la italiana, y gruesa para la prensa francesa.

Leer las etiquetas de los paquetes es un buen ejercicio. Si bien tienen diversos datos que al principio pueden importunar, poco a poco comienzan a adquirir sentido individual y en conjunto. ¿Qué información ofrecen las etiquetas? Aparecen la región y a veces el nombre del caficultor; la variedad y la altitud; las características sensoriales (yo prefiero las descripciones escuetas y con sabores reconocibles en nuestra geografía); el tipo de beneficio (proceso en el que el fruto del cafeto se vuelve grano de café); el nivel y la fecha del tueste.

Por último, recomiendo comenzar con cafés simples, esos que no presentan tantas complejidades, ya que para reconocerlas y disfrutarlas se necesita técnica en la preparación y experiencia de cata. Y, antes de terminar, corresponde una advertencia (por aquello de «quien avisa, no traiciona»): el precio de los cafés de más de ochenta puntos de cata que se venden en las cafeterías y tostaderos de especialidad es levemente superior a la mayoría de los granos que ofrecen los supermercados. Aunque el importe es menor que el de reconocidas marcas internacionales. Hasta hace unos años, estas marcas globales se posicionaban como «la esencia del mejor café», pero con la experiencia que el Uruguay ha desarrollado en el café de especialidad hoy elijo indudablemente los granos que se tuestan aquí y que se venden en establecimientos en los que pregunto y aprendo. Aquellos que son propensos a «generar cultura de café».

Qué son los puntos de cata. La Specialty Coffee Association (SCA) ha desarrollado una clasificación para que los certificadores (Q Graders) puedan evaluar los granos de cualquier región. Aquellos cafés arábicos que superan los ochenta puntos, según los parámetros de la SCA, se consideran «de especialidad». Después, en el proceso de tostado, esos granos de alta calidad deben tratarse de igual manera y, finalmente, en la cafetería o en casa también requerirán los cuidados necesarios para que en cada taza florezca el gran abanico de notas aromáticas.

Imágenes: Javier Noceti, @javier.noceti

Elegancia y cordialidad en Nona, la última novedad cafetera de Carrasco

Donde convergen Costa Rica y Carlos Federico Sáez, detrás del Hotel Casino Carrasco, abrió la cafetería Nona. En una clásica casona del barrio, con entrada por las dos calles y con una pérgola de generosos vidrios, la invitación es convincente. Y en el interior, María Jesús Lestido —una de las dueñas— da la bienvenida, como si se tratara de su propia casa.

En la barra de madera blanca del primer salón están los artilugios cafeteros: una importante máquina de espresso Dalla Corte y el molino La Marzocco. El mostrador se amplía con la oferta pastelera (provocativos muffins, brownies y alfajores, entre otros). Las dos estancias de la cafetería se completan con mesas pequeñas, medianas, una grande y un living, con un destacado sillón verde, en la pérgola. Abunda la madera de colores claros, las sillas son generosas, hay flores frescas por todos lados y enchufes bien a mano. Predomina la luz natural en un ambiente distinguido, cálido y funcional, un espacio «para pasarla bien y querer volver».

De la fusión de las experiencias de María Jesús Lestido y Jerónimo Sánchez Varela nació Nona. María Jesús es la encargada de la cocina que se caracteriza por la elaboración de productos sin gluten y Jerónimo es el responsable del café. La elección de los granos de especialidad recayó en Seis Montes Tostadores. También la capacitación de todo el personal para ofrecer bebidas acorde porque «proponemos gastronomía con buen café y buen té —explica María Jesús—. Nos interesa ofrecer un buen producto, en un ambiente familiar y para todo el mundo, nada excéntrico».

Abrieron a mediados de julio y «todavía hay muchos detalles por resolver», se disculpa la emprendedora. Mientras tanto, los vecinos ya se apropian del lugar y reclaman las cookies veganas que habían probado el día anterior —estaban deliciosas, fueron éxito y se acabaron—. En breve, el menú cafetero se complementará con copiosos desayunos y varias opciones de almuerzos con algunas preparaciones clásicas y otras más creativas. En todo momento, desde la mañana a la nochecita, el servicio es a la mesa, «un diferencial en las cafeterías actuales, un detalle que nos parece importante para la propuesta que hemos desarrollado», agrega María Jesús.

El eje cafetero de Carrasco se expande con Nona y su vajilla en tonos pastel, las bebidas correctamente preparadas, la gastronomía sin gluten y un servicio que armoniza con el tipo de público que los emprendedores esperan recibir. Para un espléndido día de sol o para ver caer la lluvia, Nona tiene una ambientación primorosa y sin estridencias, música suave y un equipo que saluda, pregunta y ofrece.

Nona: Costa Rica 1555, Carrasco (Montevideo).
De lunes a sábados. Desayunos, almuerzos y meriendas. Sin gluten. Café de especialidad.
Aceptan mascotas.

Café y trabajo: la propuesta de Potts y Altius

En 26 de Marzo y Bonavita, en la citadina zona del World Trade Center de Montevideo, la sala de ventas de Altius Group tiene una cafetería abierta al público, una novedad para el mercado nacional. «Parece solo un café, pero es más, es Potts Coffee Work», explica con orgullo Guillermo Alpa mientras se ocupa del primer cortado del día. Los coffee work, work café o cafeterías para trabajar son una modalidad en auge en el amplio espectro del coworking. En estas iniciativas, que fusionan trabajo y café, el servicio de cafetería se ambienta en un marco propenso al trabajo. Con mesas y sillas cómodas, buena conexión a internet, enchufes y conectores a la mano y con música suave se generan espacios para largas estadías que se pagan mediante el consumo de bebidas y bocados.

Bajo ese concepto abrió Potts Coffee Work. Fue en octubre de 2019 en Altius Life, el showroom de una empresa de desarrollos inmobiliarios con treinta años de experiencia en el Uruguay. «Altius estaba buscando propuestas para armar el primer coffee work del Uruguay y para nosotros fue una buena oportunidad para afianzarnos en otro punto, llegar a otros públicos y acercarnos al mundo de los negocios», agrega el emprendedor, responsable junto con Jorge Locatelli de Potts Palermo, una cafetería con casi tres años de vida.

En este coffee work del Buceo se respira sobriedad y minimalismo. Hay abundante luz natural, algunas mesas chicas y varias grandes para reuniones, trabajo en grupo o cuando es necesario montar un gran despliegue de materiales. «Esto nació con el propósito de recibir a los clientes en un lugar adecuado para trabajar. Lo definimos así con los responsables del diseño de Altius —agrega Alpa—. Aquí ya hemos tenido reuniones, sesiones de trabajo, cumpleaños y charlas. Siempre con un consumo que el cliente puede decidir en el momento o algo que hayamos arreglado antes con los organizadores del evento».

Trabajan con café tostado por Fundador, una tostaduría argentina. Son granos arábicos y naturales. «Ahora tenemos de Brasil y hemos servido Colombia y Premium, el blend de la marca. A nuestro público no le gusta el café muy cítrico ni tampoco muy amargo. Respetamos las preferencias y buscamos marcas de prestigio y calidad. También con el té», agrega el emprendedor. La oferta salada y dulce se elabora en Potts Palermo. Todo es casero y en las vitrinas se exhiben alfajores, budines, scones, galletitas, bagels, wraps y bocatas. Además de café, jugos, bocados caseros y un buen ambiente para trabajar, en Potts Coffee Work hay libros para leer en el local o para llevar en alquiler —a $ 90 los quince días—. La selección incluye ejemplares sobre té, café, chocolate y otras manifestaciones gastronómicas, además de novelas y cuentos.

«Aspiramos a quedarnos mucho tiempo más, el local es lindo y está muy bien puesto —resume Alpa—. La propuesta está buena: solo con un consumo se puede disfrutar de un espacio de trabajo que es muy cómodo y que fue pensado para ese fin».

Potts Coffee Work
26 de Marzo esq. Dr. Luis Bonavita, local Altius Life
Instagram: @pottsmdeo